Bienvenido al apartado «Asesoramiento».
En primer lugar, debes comprender que cada persona tiene unas características individuales, unos objetivos concretos, una predisposición genética determinada, un historial de casos clínicos familiares determinado y unas patologías concretas (tanto a nivel anatómico, como fisiológico). Por ello, es importante que, al contactar conmigo, seas lo más preciso posible en tu situación, tanto en el aspecto nutrición como en el entrenamiento, también.
Es decir, todo lo plasmado anteriormente debe quedar recogido en los primeros e-mails en los que mantengamos contacto, dependiendo de la situación, en algunos casos y en función del objetivo también, sólo habrá que hacer algunos ajustes de pautas alimentarias, modificar algunos puntos del entrenamiento (volumen, intensidad, frecuencia…) o, por otro lado, empezar de cero con un nuevo planteamiento en ambos aspectos.
Probablemente, los puntos más importantes a tener en cuenta antes de iniciar el proceso, son:
- Adaptación: pretender pasar de comer 2 veces al día (ambas con productos ultraprocesados y sin llegar a los requerimientos mínimos de macro y micronutrientes para el objetivo) a hacer 3,4 o 5 tomas diarias (todas con frutas y verduras, ajustando valores de macro y micronutrientes…) es, casi que con toda seguridad, un fracaso a largo plazo. Una modificación efectiva requiere un proceso adaptativo.
- Adherencia: Igual que decía uno de mis profesores favoritos de la Universidad, el mismo tiempo que has dedicado para sentirte a disgusto con tu cuerpo, dedícalo para volver a recuperar el estado que tú consideras ideal. Alomejor esto exagera un poco los tiempos, pero sí es importante tener una concepción mental de objetivos a largo plazo. Una vez conseguido esto, cualquier exceso o cambio que no entre en los planes o en la planificación, debe ser comunicado, pues los resultados pueden no ser los esperados y, antes de entrar a valorar el motivo, es importante conocer estos condicionantes.
Así, una vez aclarados estos dos puntos principales, en el correo inicial es importante que me hagas una descripción lo más precisa posible de tu situación actual (resumida en los condicionantes anteriormente descritos) y en la que deberían quedar recogidos la mayoría o totalidad de estos elementos:
- Tensión arterial medida en mmHg:
- Niveles de azúcar en sangre medidos en mg/dL:
- Estilo de vida (jornada laboral, tipo de trabajo, dedicación del tiempo libre):
- Fumador (Sí o NO):
- Edad y sexo:
- Calidad del sueño:
- Peso (si conoces % de grasa, añadir también) y altura:
- Historial familiar de problemas cardíacos (si existe algún caso, si es así detallarlo):
- Nivel de estrés valorado de 0 a 10:
- Consumo de alcohol u otras drogas (cuáles y frecuencia/cantidad):
- Lesiones (tanto actuales como pasadas):
- Operaciones (tanto futuras como pasadas):
- Problemas fisiológicos (dolores en el pecho, problemas respiratorios, enfermedad crónica):
- Problemas o dolores articulares, óseos o musculares (aquí también incluir dolores de espalda, protusiones, hernias discales…):
- En el caso de ser mujer, contextualizar sobre embarazos (sí o no, y si es así, cuántos y cuando, incluyendo posibles abortos):
Después, en función de si quieres que trabajemos sobre el aspecto nutrición. entrenamiento o ambos:
- Nutrición: situación actual (describir más o menos un día normal en tu dieta con cantidades, horas de comidas y número de estas), suplementación (qué, cantidades y frecuencia), intolerancias, alergias y objetivo.
- Entrenamiento: situación actual (rutina o entrenamiento seguido a día de hoy, experiencia entrenando y número de veces por semana que entrenas) y objetivo.
Una vez descritos todos estos puntos o su mayoría, seguiremos de forma privada contextualizando tu situación todavía más (ejercicios y comidas que más y menos gustan…) y, decidiendo, en función del nivel de asesoramiento que necesites o demandes, frecuencia de revisiones y otros conceptos.
Ahora sí, puedes contactar conmigo: fitnessfuncionalcontacto@gmail.com
Muchas gracias.